el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, pidió dar la relevancia y atención que se merece a la prevención de las pandemias.

Guterres dijo: ”La covid-19 no será la última pandemia a la que deba enfrentarse la humanidad”.

El secretario general de la ONU enfatizó en la importancia de fortalecer los sistemas locales de atención primaria de salud para evitar que colapsen y asegurar el acceso a las vacunas para todas las personas en condiciones de equidad, así como lograr la cobertura sanitaria universal.

“En este Día Internacional de la Preparación ante las Epidemias demos a esta cuestión la importancia, la atención y las inversiones que se merece”, manifestó


De acuerdo con la ONU, las epidemias como el covid-19 demuestran que el mundo no está preparado de forma global para hacer frente a las crisis sanitarias. Además, señala, no solo basta que fijemos la atención en los sistemas de salud nacionales, sino que un desarrollo y acceso global a la salud es la mejor forma de enfrentar las epidemias.

La ONU señala: “Si no prestamos atención en el plano internacional, las futuras epidemias podrían ser más intensas y graves que los brotes anteriores.” Por ello, recomienda fomentar información científica, mejorar las prácticas e impartir educación sobre las pandemias desde el plano local hasta lo nacional.

Asimismo, en este Día Internacional de la Preparación ante las Epidemias, la organización insta a un enfoque integrado de salud “que fomente la cooperación entre la salud humana, la sanidad animal y la sanidad vegetal, así como el sector ambiental y otros sectores pertinentes”

El pasado 7 de diciembre de 2020, el secretario general de la ONU, la atención de todos los Estados Miembros y las organizaciones del sistema de las Naciones Unidas proclamaron el 27 de diciembre como Día Internacional de la Preparación ante las Epidemias, en el marco de la aún presente epidemia por el virus del covid-19.

Enfermedades infecciosas y epidemias pueden afectar el desarrollo social y económico a largo plazo, saturar los sistemas de salud ya sobrecargados, interrumpir las cadenas mundiales de suministro y destruir los medios de subsistencia de las personas, en particular de las mujeres y los niños, así como la economía de los países más pobres y vulnerables de una forma desproporcionada. N