Claudia Sheinbaum, candidata por la coalición izquierdista Sigamos Haciendo Historia, busca consolidar la política social de la Cuarta Transformación del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Entre sus promesas se encuentra la continuación y fortalecimiento de programas de apoyo a adultos mayores, jóvenes y comunidades vulnerables, así como la intensificación del uso de energías renovables y la atención a la crisis del agua en México. Además, resalta su gestión como alcaldesa de la Ciudad de México, donde mejoró la percepción de la seguridad.

Por otro lado, Xóchitl Gálvez, candidata de la coalición opositora Fuerza y Corazón por México, centra su campaña en el tema de la seguridad pública.

Propone medidas como la construcción de una cárcel de máxima seguridad y la reestructuración de las Fuerzas Armadas para combatir al crimen organizado. Aunque crítica con el gobierno de López Obrador, promete dar continuidad a los programas de bienestar social y completar proyectos como la refinería en Dos Bocas, aunque también contempla la posibilidad de revivir el proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de México en Texcoco.

Ambas candidatas enfrentan el desafío de ganarse la confianza de un electorado cansado de las promesas partidistas, en un contexto de crisis del sistema de partidos políticos que ha perdido conexión con las ideologías originales y se percibe como mercenario del poder.