El Apertura 2016 inició y el Puebla salió adelante con su primer rival, los camoteros visitaron el Estadio BBVA de los Rayados de Monterrey, rescataron un empate  y el primero puntito para los dirigidos del entrenador.

En una columna pasada se dijo que la directiva del Puebla, apostó por mantener una base de jugadores y lo que hace muchos años no se hacía, era reforzar o apuntalar ciertas zonas del campo con 3 o 4 refuerzos. Dicho supuesto se comprobó en la Sultana del Norte, Puebla demostró cierta forma de jugar y entendimiento que permitió lograr el primer punto.

El debutante entrenador de los camoteros, Ricardo Valiño, saltó a la cancha con el experimentado Campestrini, quien es seguridad en el marco del Puebla, atrás no cambió su formación Carlos Gutiérrez, Oscar Rojas, Robert Herrera y “Pato” Araujo.

Bien dicen que para tener buen funcionamiento hay que empezar de atrás hacia adelante y la línea defensiva viene jugando de la misma manera desde el torneo pasado, se conocen, se entienden y eso se vio en la cancha. Sin duda alguna Robert Herrera es el líder de esa zona, se mostró como siempre son seguridad y dando salida al equipo.

En medio campo, el balance y la creatividad, David Toledo, Francisco Torres y Christian Bermúdez, son elementos que también jugaron gran parte del torneo pasado juntos. El debutante Pablo Miguez, enseñó buenas cosas por momentos.

Adelante, Alexis Canelo, el anotador del empate, quizás pueda aportar una importante cuota goleadora, apenas es la primera jornada pero Canelo enseñó que tiene hambre de gol y una lucha constante por el balón. Álvaro Navarro deberá dar el estirón para esta temporada, ya tuvo tiempo de adaptación, ya que la realidad es que le costó nuevamente, aunque ciertamente es un delantero que depende de los centros y aportación de los mediocampistas.

Sin duda Alustiza seguirá siendo el referente del Puebla y quien aporte el desequilibrio y también los goles para la Franja, en esta ocasión no pudo estar, pero en casa todos esperan este en la alineación titular.

En el partido el equipo tuvo el balón, en gran parte de los minutos contó con la posesión del balón, sin embargo parece que les faltó profundidad y terminar las jugadas en el área rival, generaban y se sentía peligro, habrá que esperar dos o tres jornadas para tener ese correcto funcionamiento.

Al finalizar el encuentro Valiño destacó que el equipo necesitó ser más vertical y reconoció la falta de profundidad, aspectos que imagino deberán trabajar en la semana.

Es muy prematuro decir que ocurrirá con este Puebla, pero tal parece que no andará mal, se esperaría un mejor torneo que el anterior y todavía un mayor funcionamiento, ya que se cuenta con dicha base de jugadores.  

Por el momento rescataron un punto en una aduana muy complicada, en donde tienen 23 años sin ganar, aunque esa es una deuda pendiente.