Campesinos respiran aliviados con la llegada del agua

Autoridades vigilan posibles desbordamientos

Después de un largo silencio de más de medio año, el río Tizaac volvió a sonar. El cauce, que llevaba seco desde octubre, ha retomado su curso —aunque con timidez— tras las intensas lluvias del fin de semana en la región de la Mixteca poblana.

Este pequeño pero significativo flujo se originó en Xayacatlán, donde la lluvia cayó con fuerza, y recorrió su camino natural hasta llegar a Guadalupe Santa Ana, pasando por Acatlán de Osorio. Aunque no es una crecida abundante, el agua ha traído consigo una bocanada de alivio para comunidades que llevaban meses con los campos sedientos y el ánimo bajo.

No fue el único río que despertó. El río Mixteco también mostró señales de vida. Habitantes de Axutla compartieron imágenes en redes sociales donde se ve al cauce recobrando fuerza tras semanas de estar casi seco. Este río atraviesa varias localidades clave como Piaxtla y Tecomatlán, por lo que su reactivación es vista como una señal de esperanza colectiva.

Las autoridades locales reconocieron que, si bien no hay reportes de daños, se mantienen atentos ante posibles riesgos por desbordamientos. “Es una buena noticia, pero hay que seguir vigilando”, comentaron desde Protección Civil.