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Sudáfrica, Corea del Sur y un rival europeo pendiente formarán el desafío.
México ya conoció a sus rivales del grupo “A” para el Mundial de Norteamérica 2026, un punto de partida que activa el pulso competitivo del equipo nacional. El sorteo colocó al Tricolor junto a Sudáfrica, Corea del Sur y un tercer equipo aún por definirse, procedente del repechaje europeo. La pregunta inevitable surge: ¿cómo se ha desempeñado México frente a estos oponentes?
El primer duelo será determinante. México abrirá la justa ante Sudáfrica el 11 de junio de 2026 en el Estadio Azteca, un escenario cargado de simbolismo. El historial entre ambas selecciones muestra un balance favorable para los mexicanos: 2 victorias, 1 empate y 1 derrota en cuatro encuentros. El único empate ocurrió en su único choque mundialista, también una inauguración, durante Sudáfrica 2010, un recuerdo que vuelve a escena con cierta dosis de nostalgia competitiva.
El segundo rival, Corea del Sur, representa un desafío más amplio. Con 15 enfrentamientos en su historial, México domina con 8 victorias, además de 3 empates y 4 derrotas. Será la tercera vez que se enfrenten en una Copa del Mundo. En ambas anteriores, los mexicanos salieron airosos: 3-1 en Francia 1998 y 2-1 en Rusia 2018, marcando una tendencia que fortalece la confianza del equipo en duelos mundialistas.
Queda pendiente el rival europeo, que saldrá de la Ruta D del repechaje entre República Checa, Irlanda, Dinamarca y Macedonia del Norte, programado para disputarse el 26 y 31 de marzo. Sin embargo, los antecedentes presentan un panorama variado:
República Checa: 1 derrota.
Irlanda: 2 victorias y 4 empates.
Dinamarca: equilibrio total con 2 triunfos, 2 empates y 2 derrotas.
Macedonia del Norte: sin encuentros previos.
México llega al Mundial con una lectura estadística diversa, pero con la experiencia suficiente para afrontar un grupo exigente bajo el foco global del torneo de 2026.


