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Familias divididas entre apoyo y rechazo al acuerdo judicial
Un juez federal de Texas decidió desestimar un cargo de asociación delictuosa contra Boeing, en el marco de un caso vinculado con los dos accidentes del 737 Max que dejaron 346 personas fallecidas. La resolución, emitida por escrito el jueves, fue firmada por el juez de distrito Reed O’Connor, quien aprobó la solicitud del gobierno federal para cerrar el proceso penal como parte de un acuerdo financiero y corporativo más amplio.
El acuerdo establece que Boeing deberá pagar o invertir 1,100 millones de dólares adicionales, compensar a las familias afectadas y reforzar los protocolos internos de seguridad y calidad. La decisión ocurre después de una audiencia emotiva a inicios de septiembre, en la que familiares de víctimas pidieron rechazar el arreglo y nombrar un fiscal especial para continuar el caso.
Los accidentes, registrados en Indonesia (2018) y Etiopía (2019), se produjeron con menos de cinco meses de diferencia y provocaron la muerte de pasajeros y tripulación. Las investigaciones señalaron que Boeing no informó completamente a los reguladores sobre un sistema de control de vuelo, cuyo mal funcionamiento inclinó repetidamente la nariz del avión hacia abajo por lecturas erróneas de un solo sensor.
El caso ha tenido múltiples giros desde enero de 2021, cuando el Departamento de Justicia acusó a la empresa de defraudar al gobierno de Estados Unidos. Un acuerdo previo que habría obligado a Boeing a declararse culpable no fue aprobado por O’Connor.
Según declaró el Departamento de Justicia, resolver ahora el caso evita riesgos de que un juicio dejara a la compañía sin sanciones adicionales. No obstante, cerca de 100 familias mantienen su rechazo.
“No permita que Boeing compre su libertad”, expresó Catherine Berthet, quien viajó desde Francia tras la muerte de su hija.
