El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo un llamado a evitar la manipulación de los estudiantes de Derecho que se manifiestan en contra de la reforma al Poder Judicial.

El mandatario aseguró que es falso que dicha reforma esté encaminada a establecer un régimen autoritario, dictatorial o monárquico, como sostienen algunos críticos.

Durante su intervención, López Obrador subrayó la importancia de proporcionar a los jóvenes todos los elementos para que formen su propio criterio.  

“Si le damos tiempo a esto es para que no manipulen a los jóvenes que estudian Derecho, para que tengan todos los elementos”, expresó.

López Obrador también se refirió a los estudiantes que han participado en las protestas, señalando que es posible que algunos de ellos crean en las acusaciones promovidas por lo que llamó “intelectuales orgánicos y corruptos del régimen de privilegios que imperaba en nuestro país”.

Sin embargo, el presidente insistió en que tales acusaciones son falsas y que la ciudadanía ya está tomando conciencia de ello.

El contexto de estas declaraciones se da un día después de que cientos de estudiantes de Derecho, encabezados por alumnos de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), se manifestaran en la Ciudad de México. Los jóvenes marcharon desde el Ángel de la Independencia hasta el Senado de la República, expresando su rechazo a la reforma judicial impulsada por el gobierno.

López Obrador ha defendido en múltiples ocasiones las reformas que ha promovido durante su mandato, argumentando que buscan corregir las injusticias y los privilegios del pasado.

No obstante, estas iniciativas han enfrentado una oposición considerable, tanto de sectores académicos como de actores políticos, quienes han expresado preocupación por un posible debilitamiento de las instituciones democráticas del país.

La protesta de los estudiantes es un reflejo del descontento que ha generado la reforma judicial en ciertos sectores de la sociedad, especialmente entre aquellos que consideran que podría concentrar demasiado poder en el Ejecutivo.

Aunque el presidente ha rechazado estas críticas, el debate sobre el futuro del Poder Judicial en México continúa siendo un tema central en la agenda política del país.