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La tecnología ha traído muchas ventajas, pero también peligros que, si no se regulan, pueden afectar a cualquiera. En Puebla, esta realidad es urgente. José Luis García Parra, coordinador de gabinete, explica que desde noviembre de 2024, cuando fue diputado local, impulsó una iniciativa para llenar un vacío legal crucial: proteger a las personas de los delitos en el ciberespacio.
Lo interesante es que la propuesta fue apoyada por todos los partidos, algo poco común y que habla del consenso que genera la seguridad en línea. El PAN, PRI, Morena, Movimiento Ciudadano y otros, se unieron para buscar una solución concreta.
¿Y qué busca esta ley? Básicamente, tipificar delitos como el fraude electrónico, la usurpación de identidad y el temible grooming, donde adultos se hacen pasar por menores para acosar y extorsionar a niños y adolescentes. Además, aborda el ciberacoso y el ciberasedio, que muchas veces se perpetran desde el anonimato y afectan gravemente la salud mental de las víctimas.
Hoy, cuando alguien sufre este tipo de ataques, la justicia es limitada porque no hay leyes claras que castiguen estos actos. Por ejemplo, alguien puede perder sus datos bancarios o ser víctima de amenazas, y la denuncia no avanza.
El proyecto está en fase de dictaminación, y se espera que pronto se convoque a las y los diputados para perfeccionarla. Según José Luis García Parra, la iniciativa no busca silenciar críticas ni opiniones, sino proteger a las personas de la violencia digital.
Las sanciones van desde multas económicas hasta penas de prisión de hasta tres años, algo que podría cambiar el panorama de la seguridad digital en Puebla.
Es un esfuerzo que pone a Puebla a la vanguardia en protección cibernética y que podría marcar un antes y un después para la tranquilidad de sus familias.