🔹 Luisa María Alcalde advierte: no habrá impunidad en Morena.
🔹 Caso de Hernán Bermúdez sacude a liderazgos del partido.
🔹 Durazo pide evitar costos políticos a Sheinbaum.

En la Ciudad de México, durante una sesión clave del Consejo Nacional de Morena, Luisa María Alcalde, presidenta nacional del partido, fijó postura firme frente a las acusaciones que sacuden al movimiento: ningún integrante será protegido si viola los principios de la Cuarta Transformación.

La advertencia llega en medio de la polémica por las investigaciones judiciales contra Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad de Tabasco y figura cercana al exgobernador y hoy senador, Adán Augusto López. Aunque los señalamientos son graves, López se mantiene en silencio, alegando que corresponde a la autoridad actuar.

Desde el estrado, Alcalde lanzó un mensaje directo:

“Morena no protege a nadie que traicione nuestros valores. Sea militante o no, quien cometa actos de corrupción debe responder por ellos”.

Rechazó, además, el discurso de la oposición que intenta homologar a todas las fuerzas políticas:

“No somos iguales. Este es un movimiento que nació para servir al pueblo, para erradicar la corrupción y construir un país justo”.

El presidente del Consejo Nacional, Alfonso Durazo, también tomó la palabra, exhortando a los militantes a actuar con responsabilidad, sobre todo ante el nuevo liderazgo de Claudia Sheinbaum como presidenta electa. La consigna es clara: evitar errores que puedan comprometer la credibilidad del proyecto.

Morena reafirma así su compromiso con la transparencia, la legalidad y la justicia social, en medio de un clima nacional que exige integridad y congruencia.