• El conflicto se intensifica tras días de violencia en Damasco.
• Comunidad drusa, en medio del fuego cruzado.

La Fuerza Aérea de Israel atacó este viernes una zona cercana al palacio presidencial de Siria, en Damasco, como respuesta a los recientes enfrentamientos entre milicias drusas y fuerzas leales al gobierno. El hecho ocurre tras una advertencia directa de Israel a Siria para que se abstuviera de avanzar hacia aldeas drusas en el sur del país.

El bombardeo se suma a una serie de tensiones que comenzaron el lunes, luego de la difusión de un audio polémico que enfureció a la comunidad suní. Aunque se atribuía a un clérigo druso, este negó su participación en el mensaje a través de redes sociales.

De acuerdo con el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, los enfrentamientos han dejado al menos 56 muertos en los suburbios drusos de Sahnaya y Jaramana, mientras que el Ministerio de Información sirio confirmó la muerte de 11 agentes de seguridad.

La comunidad drusa, una minoría religiosa con fuertes raíces en Siria, se encuentra ahora en medio de una escalada que involucra a potencias regionales. El ataque aéreo, segundo de Israel en la semana, fue descrito por medios sirios como un golpe a las inmediaciones del Palacio del Pueblo, una señal clara hacia el gobierno liderado por grupos islamistas, como Hayat Tahrir al-Sham.

“Este ataque genocida es injustificable”, declaró el jeque Hikmat Al-Hijri, líder espiritual druso, tras los hechos.