🔹 Tribunal argentino avala prisión domiciliaria por seguridad
🔹 La expresidenta lleva tobillera electrónica desde esta semana
🔹 Inhabilitada de por vida para cargos públicos

El tribunal sostuvo que su permanencia en casa es la única vía viable para resguardar su vida e integridad física, y remarcó la imposibilidad de garantizar su seguridad en prisión sin recurrir al aislamiento.

Ya con un brazalete electrónico en el tobillo, Fernández deberá permanecer en su residencia del sur de Buenos Aires, salvo causas de fuerza mayor, y evitar cualquier conducta que perturbe a los vecinos. La exmandataria también deberá entregar una lista con sus contactos autorizados, incluyendo familiares, médicos y abogados.

La decisión desestimó la postura de dos fiscales federales que solicitaban prisión común. A diferencia de ellos, el tribunal señaló que una cárcel común implicaría riesgos reales para su integridad debido a su condición de figura pública y referente del peronismo centroizquierdista.

El fallo también descarta que la edad de la expresidenta (72 años) sea decisiva, aunque se reconoce como un factor atenuante bajo la ley argentina.

En 2022, Cristina Fernández fue hallada culpable de administración fraudulenta, al comprobarse irregularidades en 51 licitaciones de obras viales entre 2003 y 2015, adjudicadas en su mayoría al empresario Lázaro Báez, también condenado. El escándalo involucra el periodo presidencial de su esposo, Néstor Kirchner, y el suyo propio.

Tras la reciente ratificación de la condena por parte de la Corte Suprema, Fernández queda además inhabilitada de por vida para ocupar cargos públicos, lo que frustra su intento de postularse en las elecciones provinciales de septiembre.

Ella ha insistido en que se trata de una persecución política orquestada por sectores conservadores para apartarla de la vida pública.