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La policía británica confirmó que dos personas murieron y cuatro más resultaron heridas de gravedad después de que un vehículo arremetiera contra un grupo de transeúntes y un hombre fuera apuñalado frente a la Heaton Park Hebrew Congregation Synagogue, en Crumpsall, al norte de Mánchester, este jueves por la mañana.
El hecho sucedió mientras la comunidad judía observaba Yom Kipur, el día más sagrado del calendario judío. Las autoridades identificaron al sospechoso como Jihad Al-Shamie, de 35 años, ciudadano británico de origen sirio, quien fue abatido por agentes armados pocos minutos después del ataque.
El Comisionado Asistente Laurence Taylor, jefe de la unidad antiterrorista de la Policía Metropolitana, declaró que el caso fue clasificado como incidente terrorista. En sus palabras: “Las víctimas y sus familias están en el centro de nuestros pensamientos. El ataque en Yom Kipur es devastador para toda la comunidad judía”.
La policía desplegó el protocolo de emergencia “Plato”, activado en situaciones de terrorismo en curso. Además, informó que se realizaron dos arrestos adicionales relacionados con el atentado.
El primer ministro británico, Keir Starmer, expresó desde Copenhague que estaba “horrorizado” por lo ocurrido y anunció su regreso inmediato a Londres para encabezar la reunión de emergencia del comité COBRA.
Desde la Community Security Trust, Dave Rich subrayó que durante las festividades judías existe coordinación estrecha con la policía, dado que las sinagogas permanecen llenas todo el día.
Este ataque revive recuerdos de la tragedia de 2017 en el Manchester Arena, cuando un atentado suicida durante un concierto de Ariana Grande dejó 22 víctimas mortales.
