Donald Trump, presidente de Estados Unidos, evadió a la prensa en un día crucial marcado por la mayor caída en los mercados bursátiles desde su regreso al poder. Este lunes, el índice S&P 500 descendió un 2.7%, el Nasdaq perdió un 4% y el Dow Jones cerró con una caída de 890 puntos (2.1%), cifras que no se veían desde septiembre.

El magnate republicano tenía tres eventos programados en la Casa Blanca, incluyendo una reunión con consejeros tecnológicos y una ceremonia para juramentar al nuevo director del Servicio Secreto, Sean Curran. Ninguno de estos actos fue abierto a la prensa, rompiendo con la tradición de permitir preguntas al presidente en este tipo de eventos.

Causas del desplome y reacciones

Un alto funcionario estadounidense atribuyó la volatilidad de los mercados a los “espíritus animales”, término del economista John Maynard Keynes para describir cómo las emociones humanas influyen en el comportamiento económico. Sin embargo, la Casa Blanca minimizó el impacto de esta caída, argumentando una fuerte divergencia entre el sentimiento del mercado y las acciones reales de las empresas.

Por su parte, Kush Desai, portavoz presidencial, destacó que los líderes industriales apoyan la agenda económica de Trump, basada en aranceles y desregulación. A pesar de la crisis, Trump mantiene su postura a favor de aranceles elevados, especialmente contra productos de China, Canadá y México.