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Atacante murió tras ser abatido por policía tras usar coche y arma blanca.
Dos fieles murieron y tres resultaron gravemente heridos en Heaton Park.
ONU exige acciones urgentes contra odio y antisemitismo global.
Primer Ministro británico ordena más vigilancia en lugares de culto.
Cuerpo de la noticia
El jueves pasado, una sinagoga de Mánchester fue escenario de un ataque violento que terminó con la vida de al menos dos fieles y dejó a tres personas gravemente heridas. El agresor, identificado como un hombre armado que usó un coche y un arma blanca, fue abatido por disparos de la Policía de Gran Mánchester.
El incidente ocurrió en Heaton Park, un barrio con importante comunidad judía, mientras los fieles celebraban Yom Kippur, considerado el día más sagrado del calendario judío. El ataque conmocionó a la ciudad y elevó la alarma sobre el creciente antisemitismo.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, condenó enérgicamente el atentado:
“Los lugares de culto son espacios sagrados donde las personas buscan paz. Atacar una sinagoga en Yom Kippur es especialmente atroz”.
Fuente: ONU.
En reacción, el Primer Ministro británico, Keir Starmer, aseguró que se desplegarán más efectivos policiales para proteger los lugares de culto judíos. La policía local también confirmó dos detenciones relacionadas con el hecho.
Guterres expresó su solidaridad con las víctimas y sus familias y subrayó la urgente necesidad de combatir el odio y la intolerancia en todas sus formas. Este ataque reaviva el debate internacional sobre la protección de comunidades religiosas y la lucha contra la violencia motivada por odio.