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Autoridades confirman vínculos de agresores con narcomenudeo y redes de extorsión.
La madrugada del martes 18 de noviembre, un comando irrumpió en el bar La Coss y desató un ataque que volvió a estremecer al sur de Puebla. El lugar, un table dance ubicado en 11 Sur y 105 Poniente, quedó envuelto en llamas tras el ingreso de hombres armados que, según las primeras descripciones, llegaron en motocicletas, dispararon dentro del sitio y rociaron combustible para provocar un incendio devastador.
El hecho suma un nuevo nombre a la lista de víctimas. José Miguel N., de 30 años, murió en el Hospital del Norte después de permanecer internado desde aquella madrugada marcada por las quemaduras severas que sufrió. Su fallecimiento elevó a seis el número de personas que perdieron la vida: cuatro hombres y dos bailarinas, una de ellas de origen cubano.
Familiares de las víctimas pidieron a las autoridades “llegar al fondo de la investigación”, al considerar indispensable esclarecer el origen de esta agresión. Las primeras versiones oficiales sostienen dos líneas principales: narcomenudeo y extorsión, identificadas como las motivaciones detrás del ataque.
El secretario de Seguridad Pública Estatal, vicealmirante Francisco Sánchez González, confirmó que los responsables “están vinculados a células dedicadas al cobro de piso y al tráfico de drogas” en la zona metropolitana. La declaración reforzó el enfoque de la investigación, que continúa abierta mientras peritos y cuerpos investigativos reconstruyen los momentos previos al incendio en La Coss.
